Filosofía.
Nuestras uvas habitan en los rincones de una Ex Hacienda, de casi 270 años. Dan su cuerpo para hacer vinos con una tradición que requiere más talento humano, que herramientas. El viento filoso del pasado supo dejar su huella en profundas raíces que hoy emiten una contradicción tan natural como bendita: La riqueza del desierto coahuilense… ahí donde los extremos forjan carácter. La inspiración nos ha llevado a proyectar nuestra trilogía de etiquetas, como un homenaje a nuestros enemigos eternos: Lepus, Corvus y Canis representan a la Liebre que muerde la parra, el Cuervo que hurta la semilla y el Coyote que engulle la uva. Pero aquí no hay buenos ni malos: como habitantes del desierto todos somos testigos de la historia. Nuestra cepa es de familia, y tres generaciones poseemos esa estirpe apasionada por la tierra y sus virtudes. Nuestro objetivo: crear productos capaces de activar la capacidad de asombro ante un vino fascinante.
La bodega.
Bodegas Capellanía se funda en el año de 1946, en Ramos Arizpe Coahuila, por Don Pedro Saro y otros agricultores de la Región. Convirtiéndose estas bodegas después de unos años en Pedro Domecq. Siendo la primera bodega de Domecq en México en ese tiempo. La Familia Saro, la segunda y tercera Generación Retoman Bodegas Capellanía después de que Pedro Domecq se retira de la Región.
Del año de 1970 a 2010, las cepas de los viñedos siguieron latentes en San Juan de Amargos, esperando mejores tiempos para el vino de Ramos Arizpe, y así en el año 2010, en un tributo a Don Pedro Saro Martínez, y a muchos agricultores de Ramos Arizpe, resurge BODEGAS CAPELLANIA para honrar a estos grandes hombres de nuestro desierto.
Hoy en día se comienza a producir nuevamente en el desierto de Ramos Arizpe variedades como MALBEC, SYRAH, MERLOT, CABERNET SAUVIGNON, MOSCATEL … para producir las joyas del desierto en la Hacienda San Juan de Amargos, en Paredón Coahuila.
Esta es la cepa de la familia, aquélla que perdura desde que Don Pedro Saro, en 1946 empezara con este gran proyecto.
La primer cosecha!!! Una espera de mucho tiempo, con más ganas que aparatos, pero con una ilusión tan grande. En el 2013 entre pisados de uva y el esfuerzo de la familia pudimos embarricar las primer cosecha!!! Una cosecha que hoy en día es historia.
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La hacienda de San Juan de Amargos, formaba parte de la gran Hacienda de patos de la hoy población denominada General Cepeda, pertenencia en el siglo pasado a la Familia Sánchez Navarro.
La Hacienda de Amargos, data de 1750 aproximadamente. Pero fue hasta el período de 1870 - 1910 cuando, siendo propietarios de la Hacienda la Familia de Don José Calderón, fundadores de la Cervecería Cuauhtémoc, cuando fue reconstruida a como prácticamente se conoce hoy en día. La Hacienda de San Juan de Amargos, se dedicaba en aquél entonces a la siembra de trigo, avena, maíz y tenía un gran establo de vacas que surtía leche en la Cd. De Monterrey que se encuentra a una hora escasa de esta población por medio del ferrocarril.
La Hacienda de Amargos contaba con dos presas, una precisamente en el casco de la hacienda a un lado de la Casa grande, y otra en su parte Sur-Este, en donde actualmente se puede observar la cortina y compuerta de esta presa.
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La hacienda.
1911
Año cuando desde la Hacienda de Amargos, el ejército de Pancho Villa la división del norte toma la población de Paredón Coah. Eje ferroviario de mucha importancia, debido a la toma de Paredón fue que el ejército revolucionario se apoderó y controló toda la parte Norte del País. La Hacienda de Amargos constantemente estaba cambiando de bando, unas veces controladas por el Ejército Federal, otras por el ejército Revolucionario.
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Durante la época de 1920 -1940, la Hacienda se dedicó al cultivo de la Vid, siendo una zona importante vinícola en ese tiempo, así como al cultivo de la cebolla
En los años de 1930-1950, la Hacienda de Amargos, se dedicó al cultivo de la Vid, con más de 150 has. de cultivo de uva de mesa (variedad Rosa de Perú, Tokey) y de uva para vino. La hacienda todavía propiedad de la familia Calderón de Monterrey, entregaba su producción de uva a Bodegas Capellanía, en la población de Ramos Arizpe.
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1920-1950
1945
La Hacienda fue comprada por varios agricultores de la cabecera Municipal, las familias García y Gutiérrez, viviendo en esta época una bonanza muy importante por el cultivo de chile y del tomate, así como la producción de la cera de Candelilla. Dejando la produccion de uva en un segundo plano.
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1960
1960, fue comprada por la familia Villarreal de la Ciudad de Monclova, y este rancho fue dedicado a la producción de Ovejas, llegando a tener rebaños hasta de 5,000 cabezas.
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1980
Don Pedro Saro Martínez, compra la Ex Hacienda Amargos rancho símbolo en la región por su antigua historia, la Hacienda de Amargos es totalmente reconstruida, siempre respetando su arquitectura original, en el año de 1990 y después de que la familia dedicó este rancho a la producción de borregas y a la producción de chile serrano, para el año de 1990 se plantó la huerta de Nogales que actualmente tiene una edad de 25 años.
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2009
De la misma manera, y siguiendo una tradición familiar, en el año 2009 se planta la primera cepa reviviendo tradiciones y sueños que habían quedado en el pasado. Cepa que nos recuerda la unión familiar; y de la misma manera plantamos esta ilusión que hoy en día es una realidad. Una tradición, una historia que perdurará para siempre
En el año de 2009, continuando la tradición familiar, los nietos de don Pedro Saro Martínez, rescatan un par de cepas madres de vid, que siempre estuvieron en los patios de la casa grande de Amargos, cepa de vid que se resistió a morir por espacio de 70 años, no la mato ni el tiempo, ni las enfermedades, ni el olvido. Es así como los hermanos Saro- Llaguno, reviviendo un sueño que había quedado en el pasado, siembran las primeras hectáreas de viñedos, rescatando las cepas originales del rancho Amargos. Y dando memoria al pasado de don Pedro Saro Martínez (emigrante español y fundador de Bodegas Capellanía). Con la siembra de estas cepas al igual que con la siembra de los nogales, nos recuerda y simboliza la unión familiar y sobre todo, reafirma la profundidad de las raíces que la familia Saro (familia emigrante española) echa raíces profundas como la de los nogales y las de la vid. Reafirmando en forma definitiva el nuevo origen de la familia Saro, como ramosarizpences, y familia de este desierto coahuilense.
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Bodegero en Jefe (WineMaker)
Socio fundador de Bodegas Capellanía y responsable de la elaboración del vino. Nacido en Monterrey Nuevo León México. Ingeniero Agrónomo del Tecnológico de Monterrey y apasionado de los procesos enológicos. Su conocimiento del campo sumada a su pasión por el mundo del vino todo lo que involucra, lo ha llevado a descubrir y desarrollar nuevas formas de hacer las cosas tratando de dar un toque especial a esta Bodega. Crear productos capaces de activar la capacidad de asombro ante un vino fascinante.
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Vista: Muy intenso, mostrando rojos púrpura.
Nariz: Aromas profundos a frutos rojos silvestres, especies como la pimienta negra y dulzores de confite, junto a notas de humo, cuero y reminiscencias carneas.
Boca: Suntuoso. Posee una entrada potente denotando sus taninos firmes pero redondos, producto de su añejamiento en barrica. Su acidez balanceada lo hace amable y con final largo.
Notas de cata
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PRÓXIMAMENTE
Notas de cata
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